Cómo almacenar y conservar el chorizo correctamente

Sabemos que en tu casa nunca falta el Chorizo Palacios, ya sea en cualquiera de sus variedades: Dulce, Picante, Picoteo, Sabrosso…  En el siguiente artículo, queremos darte una serie de consejos prácticos para garantizar que tu Chorizo Palacios preferido se mantenga en óptimas condiciones durante el mayor tiempo posible.

Chorizo curado
La gran mayoría de las variedades de Chorizo Palacios pertenecen a esta categoría. Aunque puede hacerse, no es obligatorio guardar el chorizo curado en el frigorífico. De hecho, lo ideal es conservarlo en un lugar fresco y seco, en el que no haya cambios bruscos de temperatura, con una buena ventilación, colgado boca abajo y sin que se toque con otra pieza. Sin embargo, como no es habitual disponer en casa de un espacio con estas características, la nevera suele ser la mejor alternativa. Eso sí, antes de degustarlo recomendamos sacarlo una hora antes del frigorífico y así potenciar su sabor.

Una vez empezado…
A no ser que seáis muchos, es muy difícil comerse una pieza de chorizo de una sentada. Cuando necesitamos guardar la sarta ya empezada, lo ideal es colocar la parte del corte orientada hacia el suelo y tapada para que no entre en contacto con el aire. Un truco consiste en untar la zona del corte con aceite y cubrirlo con film transparente.
En otras ocasiones, lo que nos sobran son las rodajas ya cortadas. En ese caso, lo más recomendable es colocar cada rodaja una sobre la otra, formando una torre que envolveremos con papel film transparente y guardaremos en el frigorífico.

Chorizo fresco
Este tipo de chorizo sí que debe conservarse obligatoriamente en el frigorífico. Si el chorizo se encuentra dentro de su envase puede guardarse hasta la fecha indicada en el envoltorio. En cambio, si por lo que fuere se le ha despojado de su envoltorio no pueden pasar más de 3 o 4 días antes de su consumo. Las estanterías centrales y superiores son el lugar ideal para guardar el chorizo fresco en el frigorífico, donde la temperatura varía entre 4 y 8 grados. Es importante además que no se toque con otros productos. Si es necesario mételo en un tupper o una quesera.